Muchas son las leyendas y mitos que rodean este molesto tema y múltiples son las veces que padecemos esta incómoda situación, pero ¿sabemos realmente qué es y por qué se produce?
La tos no es de por sí una enfermedad, es un método de defensa de nuestro cuerpo, ¿no te lo crees? pues te explico por qué y cómo lo hace.
Cuando nuestro cuerpo nota presencia de moco en la garganta, infección, irritación o inflamación de las vías aéreas, lo que hace es crear un mecanismo para evitar esa obstrucción que le molesta y empieza a toser para aliviarse y para facilitar así la respiración, su principal objetivo.
No hay que alarmarse siempre porque tengamos tos, pero hay que conocer los distintos tipos de tos que existe; podemos hacer dos clasificaciones básicas:
-una que se refiere a describir si la tos que padecemos en ese momento cursa:
- a) con mucosidad, la llamamos “productiva”(a veces la identificamos también como tos de pecho o tos con ruido)
- b) o sin mucosidad, siendo esta última conocida como tos seca o “no productiva” (a veces la identificamos como tos con cosquilleo, carraspeo o irritación).
-otra clasificación se refiere a describir la tos en función del tiempo de duración de la misma:
- a) tos aguda: suele durar 3 semanas, es la más frecuente, generalmente se relaciona con infecciones virales como la gripe o resfriado.
- b) tos sub aguda: suele durar entre 3-8 semanas, generalmente relacionada con infecciones virales, como la anterior, pero también puede ser el primer signo de un trastorno más grave, a valorar por el médico.
- c) tos crónica: puede ser causada por otros tipos de trastornos, como pueden ser asma, enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), enfermedad pulmonar obstructiva (EPOC).
Otro dato a tener en cuenta cuando hablamos de tos es el color del esputo, siempre se da en el tipo de tos “productiva”; debes saber que las flemas de color verde o amarillo pueden ser indicativas de infección bacteriana y pueden requerir antibióticos. No te olvides visitar al médico en estos casos.
Aunque está claro que no se pueden adquirir antibióticos sin receta médica, puede ser que tengas un resto en casa de una vez pasada y sea bastante tentador cuando nos encontramos mal, pero no son siempre la mejor opción como acabas de leer en las líneas anteriores, así que mucho cuidado y consulta siempre a un profesional sanitario.
Espero haberte ayudado y que estos trucos te sean útiles para poder entender lo que te ocurre en cada momento y ¡¡que la tos no te limite!!