La complicada situación en la que nos encontramos suma puntos negativos a nuestra dieta, probablemente sucede porque el estrés se apodera de nosotros y la apatía de nuestra cesta de la compra.
Sea por el motivo que sea estamos comiendo MAL, para qué vamos a engañarnos, y eso pasa factura a nuestro organismo, concretamente hoy hablamos de la mala salud de nuestra piel.
El principal responsable de que nuestro plan de alimentación diario sea adecuado o no viene dado por la cesta de la compra y ésta ha cambiado últimamente y es comprensible, ahora que pasamos más tiempo en casa, la sensación de que vivamos en una burbuja en el tiempo como si fuésemos los protagonistas de la película «el día de la marmota», el aburrimiento y la falta de sol,van haciendo mella en nuestro buen criterio y caemos en consumir alimentos con menos aporte nutricional y más aporte calórico, vengo a referirme a los caramelos, chocolate y fritos,sin entrar en más detalles.
Sin más preámbulos voy a ir al problema que nos ocupa hoy y como siempre surgido por la necesidad que vemos cuando acudís a nuestros mostradores.
La piel está pasando de ser uno de los órganos menos nombrados a tomar un gran protagonismo y debo decir nada favorecedor;son frases como las siguientes las que visitan nuestros mostradores en los últimos días:
–¿Por qué me está apareciendo acné a estas alturas?-
-No entiendo cómo está empeorando tanto el acné de mi hijo, si lo tenía controlado-
-¿Otro brote de rosácea?,ayer no estaba así, esto es desesperante-
-Sé que me sucede cuando tengo mucho estrés,me han vuelto a aparecer hongos por la espalda-
Probablemente te identifiques con alguna de estas frases así que, si es tu caso, sigue leyendo porque voy a explicarte qué le está ocurriendo a tu piel.
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y no siempre le hacemos el caso que se merece, así que aunque no le hagamos mucho caso este órgano es un buen revelador de cómo estamos en cuanto a salud se refiere, su color,aspecto y tacto varían y en estos casos debemos prestarle un poco más de atención.
Aquí tienes un resumen de algunos cambios que nos complican el estado de nuestra piel:
-aumento en el consumo de grasas saturadas(grasas no saludables) que encontramos en bollería industrial,productos dulces como las chucherías (con hidratos de carbono de rápida absorción),
-aumento en la toma de refrescos reduciendo por tanto la ingesta de agua y finalmente por reducir la toma de fibra(consumimos menos verduras y frutas);todos estos son motivos más que suficientes para que hagamos un cambio, una parada en el camino y seamos conscientes de que no todo vale,¿qué te parece?.
Siendo amables en nuestro post de hoy y sin entrar en muchos detalles voy a centrarme y resumir por qué estos cambios afectan a nuestra piel.
Detalles como los que has leído en líneas anteriores alteran nuestra flora intestinal,sí ,estás leyendo bien, todo esto hace que se resienta la calidad de la misma y por tanto absorbamos peor los nutrientes y por descontado tenemos que cuestionar la calidad de los mismos,comprensible¿no te parece?.
¿Qué supone alterar negativamente la flora intestinal?
Un dato importante a destacar y que tenemos que tener en cuenta es que la mitad de nuestro sistema defensivo, me refiero a la mitad de nuestro sistema inmunológico, está en la flora intestinal.Quiero decir con esto que un buen o un mal tratamiento a esta parte de nuestro cuerpo tiene sus consecuencias, siendo esta la respuesta a cualquier ataque externo.
Por otro lado, tratando el tema que nos ocupa hoy, una flora intestinal maltratada puede verse reflejada en nuestra piel, siendo síntomas de ello: el acné,rosácea,atopía e incluso hongos.
Quiero dejar muy muy claro que una flora intestinal deteriorada no es el único factor desencadenante de estas incómodas situaciones de la piel, pero sí que en esta ocasión podemos posicionarla junto al estrés en el top 10 de las causas principales.
¿Qué podemos hacer para mejorar estos problemas de la piel durante el confinamiento?
Pues son varios aspectos a tener en cuenta, pero vamos a centrarnos en dos:
– primer punto: CORREGIR TU ALIMENTACIÓN,quiero decir: ¡reduce el chocolate,grasas de mala calidad y aumenta verduras,frutas y agua!,son algunos detalles que te van a venir muy bien, así que ¡toma nota!.
– segundo punto: tomar PROBIÓTICOS, bacterias beneficiosas para trabajar nuestra flora intestinal y mejorar su calidad e integridad, así como tomar PREBIÓTICOS,es decir, alimentos para esas bacterias positivas para nuestra salud.
El estado de nuestra piel es un signo de cómo está nuestra salud, así que cuídala para cuidarte.
No olvides: «prevenir para vivir y curar para mejorar porque la salud es nuestro tesoro,¿no crees?».